SIN TABLA

Y, de repente una llamada inesperada

un mensaje que no guarda nada

una situación que no es la deseada...

las olas susurran a gritos un S O S

no hay forma de disuidir al dolor

los secretos se vuelven cómplices

y el horror es el lamento de la separación.

No hay manera de conocer su cara

la sonrisa helada no demuestra nada

no hay sentimiento que deshaga

la descomunal traición afectada

por una situación que defrauda

la madurez de la cual se hacía gala...

La violencia moral no es fácil perdonarla

porque aunque haya amor

la confianza sale disparada...

y a partir de esa ola que naufraga

no existe tabla que pueda salvarla...

© Dory Lansorena